Las controversias sociales se convierten en objeto de estudio cuando han sido producto de un “encuadre” con el cual es posible identificar a los involucrados, su emergencia y también su estabilización. En el presente artículo se analiza una práctica de memorialización particular, con el objeto de dar cuenta sobre cómo el análisis social de las controversias permite configurar una propuesta general sobre la memoria en que, sus formas de objetivación, horizontes temporales y soportes de activación constituyen un juego de las memorias